Decadencia pérdida progresiva de la fuerza, intensidad, importancia o perfección de una cosa o una persona."la decadencia del comunismo; sus últimas actuaciones marcaron la decadencia de su carrerra"
El PRI podría ser, después de la conquista, el accidente más deprimente para la memoria de un país que pudo ser potencia.
La resiente renuncia del poderoso #Beltrones como secretario general del Partido de la "Revolución" Institucional me recuerda a la escena de la película Titanic, en donde brincan desesperados de un barco al ver que este se hunde.
A caso será que el señor #Manlio sobrevivirá como la bella Rose Thompson? Para que nos hacemos tontos cuando ya sabemos que si, digo logró sobrevivir a las acusaciones por corrupción, lavado de dinero y los nexos con la delincuencia organizada ratificada por los periodistas Craig Pyes y Sam Dillon, también podrá salir invicto del tremendo empellón que sufrió su mesozoico partido.
Varios #priistas salieron a lamentarse tras el pésimo resultado en los pasados comicios, pero no se dieron cuenta que les pasó lo que al niño inquieto, lo sacan del salón por aventar un papelito, le dan una segunda oportunidad y avienta un tabique. Esto es la triste realidad de un regreso fallido del partido oficial a los Pinos.
Vaya que el #PRI pagó caro la pésima ejecución de sus representantes en el poder. Gente como los Duarte, Eruviel y el mismísimo #presidente Don Enrique y su gaviota nos demostraron a los mexicanos que no siempre las segundas oportunidades son buenas.
Así que hago la observación a los que militan en sus filas por convicción, despensas, intimidación, playeras y gorras, dinero, tortas le han regalado su voto a estos weyes también ustedes le han hecho daño al país y son cómplices. Jamás olviden que en este país en la mayoría de los actos delictivos solo los más pendejos y los que menos recursos tienen son los que suelen pagar los platos rotos, es decir todos estos politiquillos que cayeron en abusos de poder saldrán invictos.
Pero la vida sabe que la ley no es justa y ya comenzó a cobrar las facturas que le deben.
Que jamás se nos olvide que nosotros somos cómplices y como dijera mi abuelita
"Tanto peca el que mata a la vaca, como el que le agarra la pata"
Escribe Arsenio Ricoy
Fuente: www.ormultimedios.com
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