¿DEBERÍAMOS CAMBIAR A DINERO ELECTRÓNICO?
Ya todos conocemos las ventajas de haber cambiado de la facturación en papel a la facturación electrónica, pero ¿qué sucedería si hacemos lo mismo con el dinero?
Es probable que la llegada del Apple Pay logre ahorrarle a los consumidores la necesidad de buscar en sus bolsillos o bolso su cartera para realizar un pago, y algunos economistas han considerado que los gobiernos deberían de tomar este ejemplo para ejecutar acciones similares.
La última década ha creado mucho movimiento en torno a una sociedad sin efectivo, pero no fue sino hasta los últimos años en los que esto se empezó a ver como una realidad posible. Aún así, lograrlo requeriría de un movimiento político, social y cultural que podría ser muy complicado en un país como el nuestro, aún así, tomando en cuenta las ventajas que nos ha traído la facturación electrónica, esta podría ser una buena solución a varios de los problemas a los que nos enfrentamos día a día.
El sitio de tecnología Mashable, publica 5 razones por las que sería una buena idea cambiar a dinero electrónico y dejar a un lado los billetes y las monedas:
1. MAYOR EFICIENCIA.
En promedio, un consumidor pasa seis horas al año buscando un cajero automático, ¡seis horas! Aunado a esto, cuando se trata de grandes cantidades de dinero, transportarlo puede ser una situación riesgosa. Un dato curioso indica que en 2013, los usuarios de los aeropuertos de Estados Unidos dejaron un total de $531,395.22 dólares en monedas en los puestos de seguridad. Al contar con métodos de pago electrónicos, podríamos evitarnos este tipo de situaciones.
2. DISMINUIRÍA LA INSEGURIDAD.
Una de las razones por las que los asaltantes buscan dinero en efectivo es porque es casi imposible de rastrear. Al eliminar esta opción, todas las transacciones podrían ser registradas y como sucede cuando se nos roba una tarjeta, esta podría ser desactivada para proteger nuestro dinero. El uso de dinero electrónico también ayudaría a detener la evasión de impuestos, ya que de la misma manera, las transacciones realizadas quedarían registradas y las autoridades tributarias podrían conocer la forma en la que se está moviendo el dinero.
3. SERÍA MÁS BARATO.
Producir dinero es muy caro. De acuerdo con cifras del gobierno federal, se invierten 1,800 millones de pesos anuales en fabricar billetes y monedas en México. El costo de fabricar un billete es de aproximadamente $1 peso y la moneda más cara de producir es la de $10 pesos. Al eliminar este gasto, el gobierno federal podría utilizar ese dinero en otras áreas.
4. PODRÍA CONTRIBUIR A TASAS DE INTERÉS NEGATIVAS.
Al existir dinero en efectivo, no pueden existir las tasas de interés negativas porque los consumidores siempre tienen la opción de sacar su dinero de los bancos y esconderlo bajo el colchón. Tasas de interés por debajo de cero podrían generar más y mejores inversiones y ayudar a fomentar la economía.
5. EL DINERO EN EFECTIVO ES MUY SUCIO.
Parece un punto ingenuo a discutir pero al revisar un billete o moneda en un laboratorio es fácil notar que está cubierto de bacterias que pueden provocar: neumonía, intoxicaciones, úlceras gástricas y otro tipo de infecciones. Siempre que manejes dinero recuerda lavar tus manos antes de continuar con tus actividades.
Entendemos que existen muchos puntos en contra de la eliminación del dinero en efectivo, pero si la tecnología lo trabaja lo suficiente podría generar diversas opciones que protegieran al consumidor al mismo tiempo que otorgan diversos beneficios. Un ejemplo de esto es Suecia, donde solo el 3% de las transacciones totales se hacen con dinero en efectivo.
Fuente: http://iofacturo.mx/economia/deberiamos-cambiar-a-dinero-electronico
